Proyectos inmobiliarios en Punta del Este triplican los permisos de m2 de 2016
Tanto desde la Intendencia Departamental de Maldonado como desarrolladores privados pronostican un fuerte aumento de la demanda premium.
n 2012, las construcciones en Punta del Este alcanzaron su pico luego de diez años de crecimiento constante. Ese año, la Intendencia de Maldonado (IDM) había aprobado 615.000 metros cuadrados de permisos de construcción. Luego comenzó la caída.
Según datos proporcionados por la IDM, en 2013, se aprobaron 370.000 metros cuadrados para construir; en 2014, 350.000, mientras que en 2015 y2016, 250.000. Hasta ese momento, se hablaba de una construcción detenida, de una gran cantidad de mano de obra desempleada -pasó de haber 12.000 obreros en actividad a 4.000- y de un balneario con cada vez más esqueletos de obras paralizadas.
Es enero de 2018 y sobre la playa mansa, yendo desde la parada 20 en dirección hacia la península, varios carteles de obra llaman la atención.
No lo hacen más que por el espacio de tierra que rodean, que llega a ser hasta de manzanas completas. El primero de esos carteles aparece en la parada 18 y encierra una manzana de 14 mil metros cuadrados. Se trata de la torre Venetian Luxury Residences, un edificio de 27 pisos que, una vez pronto, promete robarse las miradas.
A la siguiente parada, otro cartel cerca a las dos manzanas en las que se ubicará Fendi Château, una obra que contará con cuatro torres, una extensa piscina en el jardín que da hacia el mar y una calle que desemboca en la rambla y pasa por la parte trasera del complejo. Ambos proyectos le darán altura a una zona en la que predominan edificios de un máximo de 4 o 5 pisos.
No es necesario recorrer mucho más para percibir que algo está cambiando en Punta del Este, y las cifras lo confirman. Por estas fechas la Intendencia de Maldonado espera que los permisos de contrucción estén aprobados para un entorno de 850.000 metros cuadrados, más del triple que en 2016 y 2015.
Entre las obras de mayor dimensión, también está el WTC Punta del Este,llevado adelante por el estudio Luis Lecueder y la torre Le Parc, que se ubicará en la parada 9 de la playa brava.
Para el consultor inmobiliario Julio Villamide, Punta del Este es parte del territorio inmobiliario argentino y, por ende, se comporta “mucho más por los estímulos y variables que suceden en ese mercado que en el propio mercado uruguayo”.
n ese sentido, dijo que se ve una reactivación “importante” en los segmentos premium de Buenos Aires -como Puerto Madero- y que lo que acontece en Puerto Madero termina pasando, tarde o temprano, en Punta del Este. “Yo analizo los últimos diez años y la evolución de metros cuadrados y de precios de Puerto Madero y de Punta del Este es casi paralela”, indicó.
Explicó que Puerto Madero atraviesa en estos momentos un pequeño boom de la demanda, con muchos proyectos lanzados de valor alto, y que eso juega a favor de Punta del Este.
“Se han realizado proyectos importantes pero mucho más que por existir una demanda previa, porque se dieron condiciones muy atractivas de estímulos fiscales”, subrayó.
Aunque comienza a notarse un cambio acompañado de la gran oleada de turistas que llegó a la península para pasar la temporada, varias fuentes consultadas dijeron que todavía falta -si es que se puede volver a repetir- para llegar al boom de la construcción que atravesó Punta del Este en laprimera década del 2000.
Y es que, para hablar de boom, es necesario esperar para ver cuántas de las obras proyectadas finalmente se concretan, ya que entre los proyectos hay varios que son a largo plazo, dijo la directora de urbanismo de la IDM, Susana Laguarda.
Por su parte, Villamide dijo que no cree que se den las condiciones para hablar de boom inmobiliario: “Han cambiado muchas cosas. Hoy tenemos intercambio de información financiera con Argentina, controles de lavado de activos más intensos. No creo que con las restricciones actuales pueda generarse un boom. Más bien apuesto a una demanda más genuinade inversión”, dijo.
Laguarda agregó que lo que se hizo fue “generar condiciones propicias para que los inversores presentaran proyectos y se viabilizaran algunas obras”.
Entre esas condiciones, están los beneficios fiscales que otorga la intendencia, además de los ya existentes a nivel de gobierno nacional. Para asegurarse de la efectiva ejecución de las obras, la Intendencia de Maldonado pide un cronograma de obra para hacer el seguimiento correspondiente. “Tenemos una buena cantidad de obras pesadas y las estamos recorriendo para verificar su efectivo inicio”, dijo Laguarda.
Según la directora de Urbanismo de la IDM, los nuevos proyectos inmobiliarios provienen en su mayoría de la apuesta de inversores ya establecidos en Punta del Este, con trayectoria reconocida y varias obras finalizadas incluso en tiempos de crisis .
Eso, dijo, les da la garantía de que las obras no se paralizarán. Aseguró, además. que de finalizarse todos los proyectos paralizados que se retomaron, quedaría solo una estructura abandonada en Punta del Este. Entre los inversores hay tanto extranjeros como locales, algunos que se retiraron durante los años de retracción y decidieron volver.
“Hay extranjeros que hace 30 o 40 años que residen en el departamento y son inversores”, dijo Laguarda, sin saber hasta qué punto llamarlos extranjeros.
Para el director de World Trade Center Punta del Este, Carlos Lecueder, “Punta del Este tiene una infraestructura espectacular para atraer gente que quiera venir a trabajar, a vivir y no solo a veranear”.
“Cuando uno prepara un lugar para veraneo tiene que desarrollar vivienda, infraestructura, entretenimieinto, shoppings, y Punta del Este tiene todo. Le faltan lugares para trabajar“, subrayó.
Según Lecueder, para llevar a cabo este tipo de proyectos, se necesita que se den cuatro condiciones. En primer lugar, el permiso para hacerlo. En segundo, que el Estado comprenda la importancia de este tipo de proyectos y los promueva con exoneraciones fiscales. Por otro lado, se necesita que haya posibilidades de recibir financiamiento y acceder a capitales internacionales, y por último, que haya mercado.
“Acá por supuesto siempre hay una interrogante porque en todo proyecto uno siente que tiene que haber mercado, pero hasta no salir a la cancha no estamos seguros”, añadió.
Para Villamide, el aumento de la demanda en el mercado inmobiliario de Punta del Este, no será de forma explosiva, sino que gradual: “No va a ser una demanda explosiva como en otro períodos pero sí va a ser constante y permanente. La temporada excepcional que se está viviendo influye en valorizar los proyectos”.
FUENTE: www.iprofesional.com